martes, 3 de mayo de 2016

otoño húmedo en Buenos Aires...


Desde adentro con lápiz y papel, contemplando el jardín y pensando en nuevos proyectos. 
Para mí el otoño fue siempre una de mis estaciones preferidas, por la temperatura que se pone muy agradable, por esa luz cálida que entra por las ventanas y sobre todo porque es el tiempo de llevar adelante los planificado en el verano. 
Pero, quienes trabajamos con la naturaleza sabemos que el clima (y últimamente más que nunca) puede no acompañar y arruinar nuestros planes. Así fue que entonces Abril pasó pasado por agua y las siembras se retrasaron. También, lo que prometía ser un otoño florido terminó con finales anticipados en las anuales y bastante presencia de hongos en muchas plantas.   
Pero estas circunstancias nunca me desaniman, más bien me hacen repensar el jardín, con nuevos proyectos y alternativas para que se vea cada vez mejor. 

Igualmente algunas plantas zafaron y gracias al sol que está volviendo a brillar se van animando a florecer. Así es por ejemplo con esta Salvia 'Anthony Parker', que solamente florece en el otoño. Una sola planta ocupa un lugar importante y se sirve (en este caso) de los buxus vecinos para apoyarse.
Pariente de la Salvia Leucantha , la S. 'Anthony Parker' no es tan llamativa como su prima violeta, pero sus flores azules son igualmente muy lindas. 

En el cantero nos tomamos un último respiro antes de empezar con las tareas de poda, limpieza y división. Ya no hay nada que hacer, salvo arrancar las plantas muy enfermas (para que no se propaguen los hongos) y eventualmente pulverizar con algún fungicida. 

Delante del cantero se hizo un poco de barro, como la pendiente del jardín cae hacia ahí, probablemente hagamos alguna zanja de piedras cubierta con césped para evitar el barro y frenar un poco el agua antes de que que llegue al mismo.

A la Persicaria amplexicaule le gusta la humedad, y a las Dalias para nada, pero entre ellas se arreglan......
Los Cleomes siguen floreciendo (y así lo harán hasta que caigan las heladas), aquí apoyados sobre el Panicum virgatum. 
Las dalias son bulbosas de la estación cálida, y en otoño florecen muy bien además los colores se ponen más intensos. 

El rocío de la mañana, tan típico del comienzo del otoño....la Verbena bonariensis, otra noble herbácea perenne autóctona que, una vez que se instala, no se va más de los canteros. 

Las Salvia 'Indigo Spires', (antiguamente llamada Chola) tienen una sola contra que es que son un poco quebradizas, pero podando en verano a mitad de altura y colocándoles un tutor, pueden mantenerse prolijas, y sus flores se disfrutan primavera, verano y otoño.  
Algunas Zinnias sucumbieron ante la lluvia, esta planta que está al lado de la huerta fue atacada por oídio y algún otro hongo, y como en este cantero no se pulverizan químicos, su destino fue la pila de basura para quemar, antes por supuesto cosechamos sus semillas para la primavera que viene.
El mal tiempo trajo una poda anticipada en algunos canteros. Tal vez eso sea bueno para que las semillas de otoño-invierno, germinen antes.
Al recibir luz más directa, las semillas que cayeron durante la primavera y el verano a la tierra tendrán oportunidad para germinar. También las herbáceas perennes podadas podrán rebrotar antes de la llegada del os fríos fuertes. 
El la huerta de afuera quedaron las batatas (boniato zanahoria) que deberé levantar antes de la primera helada fuerte.

En la huerta en cajones las hojas van asomando con más fuerza: mostazas, acelga, rúcula y lechuga. 

Esta variedad de mostaza bordó es de mis preferidas, por el color y la forma de sus hojas, pero especialmente por su sabor picante. 
De despedida esta Camelia sassanqua , simple su flor y simple su cultivo. Es la primera de las camelias en florecer y no presenta demasiadas exigencias.